Se me había pasado, pero no os he hablado de la residencia, es una residencia un poco pequeña pero está bastante bien.
El dueño se llama Ian, o eso creo, porque como buen australiano no se le entiende al hablar.
Mi compañero de cuarto se llama Brandon y también es australiano, que suerte... lo mejor de todo es que no se da cuenta de que no le entiendo y él continúa hablando sin parar, espero algún día llegar a entenderle a medias.
El resto de gente es bastante maja, todo el mundo muy sociable y se les entiende mucho mejor cuando hablan. A parte hay 4 españoles más aquí, aunque son catalanes y del barça, muy buena gente.
Lo que peor llevo es lo de las comidas, a parte de que aquí se come a las 12 y se cena sobre las 7 de la tarde, no tengo ni idea de cocinar y estoy aprendiendo a marchas forzadas, bueno, de momento no salgo de la pasta, el arroz, la carne a la plancha y los huevos fritos, pero algún día me atreveré a hacer un guiso, espero que no muera nadie.
Espero que dentro de poco os pueda contar más cosas, pero de momento no llevo ni 3 días.
sábado, 1 de noviembre de 2008
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1 comentario:
Vamos golferas!!! ya has probao la fiesta australiana?? jejje... cuidate tio!! un abrazo
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